Viaje a BARCELONA

He regresado de Barcelona en un viaje relámpago. Ha sido por motivos literarios, pero me ha servido para reencontrarme con amigos que no veía desde hace 17 años y he comprobado que nos seguimos manteniendo el mismo cariño. Realmente estoy emocionada, para mí es muy importante la amistad y muy difícil tenerla.
Mis cosas personales las dejo a parte ¡que no voy a ser pesada!, (ya soy yo conmigo misma).
EL AVE a Barcelona, maravilloso. La estación de Sants elegante, no apelotonada como la de Atocha, en ésta hay que dar un cursillo para manejarse. No puedo por más que acordarme de la facilidad con que se accedía antes de la remodelación. Pero ¡claro! "esto avanza señores" ¿avanza?. A lo que voy, que empiezo a perderme. Tengo que buscar defectos al Ave (en este en concreto) ¿Para que dos baños unisex? Pues pon uno de señoras y otro de señores. Que no somos iguales, no señor, que a mí no me apetece entrar al de un señor que por razones obvias puede gotear todo, las mujeres también, pero si son limpias no. IGUALDAD es otra cosa. En cuanto al frío ¿por qué la temperatura que ponen ambiental que no es tal, no la suben cuando pasamos por zonas de 4 grados centígrados?. Pasé frío y en el lado de ventanilla más.
Comencé a temblar cuando veía un móvil, pero no, la gente fue prudente y no molestó, excepto un grupo que se dedicó a charlar en corro en voz alta, menos mal que se bajaron en Zaragoza. Eso no se hace, las personas podemos aprovechar a meditar, a leer, a estudiar, a relajarte y si estás triste a que te dejen en paz.
Conocía a la cantante Regina Do Santos, que persona más simpática.
Me beso y hasta mañana.